Con goles del argentino Ernesto Farías (´59) y Bruno Alves (´89), el campeón portugués se adjudicó por decimosexta vez la supercopa tras vencer al Paços Ferreira por 2 a 0.

El encuentro mostró al equipo del Porto decidido atacar y con la mente en el arco contrario y a su rival replegado atrás, buscando el momento oportuno para contragolpear y dar la sorpresa. Sin embargo, las esperanzas del Paços Ferreira se vieron resquebrajadas cuando, una picardía del delantero argentino, terminó por romper la paridad en el marcador. Al Paços no le quedó otra alternativa que desprenderse del planteo mesquino y salir a buscar el empate, dejándo mayores espacios para el Porto, que salió a buscar el segundo gol que asegurara el resultado. Y el gol que sellaría el resultado final llegaría a través del central Bruno Alves, para darle el triunfo definitivo al último campeón de la Super Liga.

El Porto vuelve a coronarse con el título de la Supercopa tras perder las últimas dos finales.

El encuentro se disputó en el estadio municipal de Aveiro, ante la presencia de 15.000 espectadores.